Las infecciones más frecuentes en humanos son las de vías respiratorias, vías urinarias y tracto gastrointestinal. En nuestro país son más frecuentes los estudios por cultivo bacteriano. Nuestro sector Bacteriología, a cargo de una especialista, responde de manera ágil a estas demandas. Con frecuencia es fundamental hacer correctamente la recolección del material, para lo cual se envían instructorios específicos para cada caso, los que deben ser leídos cuidadosamente a efectos de evitar pruebas con resultados inciertos por causas ajenas al Laboratorio.
La historia de los inicios de la Bacteriología, o más ampliamente de la Microbiología, es apasionante. Los protagonistas del inicio de esta ciencia fueron principalmente un francés y un alemán.
Desde hacía siglos la gente pensaba que los procesos de putrefacción (pudrición) de los alimentos eran espontáneos. Luis Pasteur (1822-1895) demostró que no era así.
Pero, mucho más importante aún, demolió la creencia de una “generación espontánea”. Hasta esa época las personas creían que en un proceso de descomposición aparecían “de la nada” organismos que generaban la descomposición. Aún hoy, en el lenguaje cotidiano se cree en eso (“guarda eso o se forman hongos”), pero los hongos ya están en el ambiente, no se forman. Y si se los deja actuar sobre ese alimento pueden descomponerlo. Los docentes de la industria alimenticia, ya sea casera o industrial, enseñan hoy en día todas las normas de buena preparación y buen mantenimiento de los alimentos.